Un nuevo comienzo

Propuesta migratoria a fin de año: Obama/México respeta derechos humanos:EU/vuelven 300 mil a clase: UNAM/cae 29% turismo en junio: BANXICO.
Unonoticias (10 de agosto de 2009)
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Las noticias vía celular nos afrecen una gama amplia de noticias de todos los aspectos "importantes" del país y del mundo. Los personajes caben en dos o tres palabras y toda su humanidad queda reducida a unas cuantas lineas.
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Hace aproximadamente un mes, a unas calles del Tec, donde se forman las mentes que serán las líderes del mañana (algunas), sucedio un homicidio, diariamente escucho al repartidor de periódicos hablar sobre un nuevo crimen, pero nadie se entera a pesar de que esas personas tenian una familia, un nombre.
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¿Podemos opinar?, ¿qué podemos opinar?, ¿cómo podemos hacer que nuestra voz se escuche?. Se escuchan los grandes periodistas, a veces algunos actores públicos que no tienen mucha idea de lo que dicen tienen más peso en la formación de la ideología del país que la gente que de verdad debería decir algo por el peso verdadero de sus palabras. Desgraciadamente a nadie le importa mucho el hecho de que gente se muera por actos viles que quedan impunes porque es más importante el costo del ataud de Michael Jackson.
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La tendencia a generalizar y hablar en grande nos ha hecho olvidar que somos personas. A veces una gran noticia podría ser mejor asimilada si se cuenta en función humana, si se presentan los beneficios y problemas que causará en la señora de la tienda de enfrente, o en el chofer de la ruta, o en el guardia de la escuela.
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Opinemos sobre las mejores formas de expresión, modernas o clásicas pero que representen un verdadero sentido de crítica hacia nosotros y hacia el mundo. El problema toral radica en la tendencia a la pasividad. El oleaje de nuestro inmenso mar es tan comodo que preferimos que nos arrastre hacia la orilla tranquila donde viven sombras sin nombre y sin rostro.
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¿Por qué opinar?
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Porque si no opinas qué caso tiene tener voz